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Nota de Prensa


El grupo municipal del Partido Popular quiere denunciar la dejadez del  gobierno municipal ante la falta de limpieza generalizada del municipio en plena temporada estival.


 El gobierno de Andrés Ripoll continua haciendo oídos sordos ante las continuas quejas de los vecinos por el deficiente estado de limpieza que presentan nuestras calles, plazas o rincones típicos, proyectando una lamentable imagen turística. Calles sin limpiar, olores, excrementos de perro sin recoger, contenedores desordados o papeleras a rebosar se han convertido en cotidianas escenas urbanas de Altea, ante la irresponsable pasividad de las autoridades municipales.  


 La falta de renovación del servicio de limpieza municipal, cuya concesión caducó el 30 de julio de 2.007, es una clara muestra de la absoluta despreocupación del PSOE por el bienestar de los vecinos y la imagen de Altea. Más de dos años sin renovar el servicio y sin realizar inversiones, que afectan al día a día de los alteanos y trasladan a los turistas y a los visitantes una imagen impropia de nuestro pueblo. La limpieza no parece ser una prioridad para el equipo de gobierno socialista, ni para el concejal de Infraestructuras, Santiago Ronda, quien hace poco había asegurado que el servicio estaría renovado antes de este verano.


Lamentablemente, las playas tampoco están a la altura de otros años, con continua presencia de algas y restos por recoger, que evidencian las deficiencias del servicio, así como la nula aplicabilidad de la Ordenanza aprobada en su día.


 En cuanto al Casco Antiguo, han sido reiteradas a lo largo de este verano las quejas de propietarios de bares y restaurantes por la ineficacia de las campañas de desinfección y desratización. Unas campañas higiénico-sanitarias que se llevan a cabo todos los veranos y que hasta la fecha siempre había realizado una empresa alteana de acreditada solvencia en el municipio. La nueva adjudicación a una empresa de fuera de la localidad, no ha hecho sino empeorar el servicio, a tenor de las críticas generalizadas de nuestros restauradores y vecinos.


 Solo hay que pasear por nuestras calles para observar el grave deterioro de muchísimos servicios existentes, que se deben cuidar todo el año, pero especialmente en la temporada alta. A modo de ejemplo, ayer mismo en las fiestas de Altea la Vella pudimos observar la oscuridad de sus calles, con diferentes zonas en las que no funcionaba el alumbrado publico.


 La única preocupación del Sr. Alcalde y su Equipo de Gobierno sigue siendo cobrar sus desorbitados sueldos a final de mes y despilfarrar en contrataciones externas, olvidando el día a día de nuestros vecinos, que a pesar de pagar más impuestos, cada vez reciben peores servicios.



  Domingo Berenguer
  Concejal del Grupo Municipal Popular

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